Sáhara, Guinea y Marruecos. Expediciones Africanas
Memorias de un biólogo heterodoxo. Tomo III
Editorial Quercus. Madrid 2004
ISBN 84-87610-13-7
En este libro cuenta sus expediciones por el Sahara Occidental o Sahara Español, ya que a mediados de los años cincuenta del siglo pasado aún eran parte de los territorios coloniales de España en África. En sus recorridos fue testigo de excepción de un desierto lleno de vida que varias décadas después es ya imposible de encontrar y de ahí su valor. Con la aparición de los vehículos a motor las gacelas, avestruces y demás bicherio grande desaparecieron por la intensa caza que se les dio. Como los naturalistas de la vieja escuela Valverde anotaba de todo, plantas, paisajes y sobre todo fauna vertebrada.
También como los pioneros en la zoología la escopeta fue para él una herramienta de trabajo más con la que colectar ejemplares para estudios y para las colecciones de los centros de investigación. Las guías y la identificación sin captura estaban aún por llegar y el conocimiento era tan básico que la colecta era aún necesaria para describir e identificar las especies. Pese a todo Valverde fue un observador atento y muy buen dibujante dejando anotados muchos apuntes e ilustraciones de observaciones en vivo de fauna que tambien recoge este libro. Cuando vio que la gran fauna desértica tenía sus días contados con la modernidad, emprendió el traslado de los últimos rebaños del antílope mohor a Almería donde se ha criado y usado para proyectos de reintroducción. Estas historias forman parte también del libro.
La otra ex-colonia africana, Guinea Ecuatorial, también fue objeto de su interés y preparó expediciones en aquellos años. Las crónicas ilustradas con dibujos de aves que anillaban son de lo más evocadoras. Sorprende el paso de su mirada del desierto del Sahara a la exhuberancia de la selva ecuatorial con sendas de elefantes y gorilas, los manglares ramoneados por los manatíes o los ríos con cocodrilos. El libro de las expediciones africanas acaba con sus últimos viajes, los que hizo durante su jubilación a Marruecos recavando información de las serpientes desérticas con la gente que más conoce de ellas, los colectores para encantadores como los que aún hoy se pueden ver en Marraquech en la plaza Yemaa el Fna.
Me esta picando la curiosidad sobre estas memorias... Estamos de suerte, mi cumpleaños está cerca.
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